Me quedé mirándolo como se dirigía hacia la puerta, sus pasos eran bastante pesados y cargados de dolor.
- ¿Te refieres a la Lilian de la cuál te enamoraste? Sí, supongo que vive en algún lugar, pero no la pienso dejar salir, es demasiado aburrida, cree en la amistad y los sentimientos de las personas, es buena, es algo aberrante para tener la naturaleza demoníaca en su interior. Sería mejor que muriese, y eso va a pasar tarde o temprano -¿Que se moría? ¿Y a mi que? Que yo supiera los demonios no se preocupaban por los demás y el sufrimiento ajeno era algo muy divertido para nosotros. En estos momentos me daba exactamente lo mismo si caía muerto, a la otra Lilian, la que mantenía encerrada en mi interior la notaba luchar, pero su poder no tenía nada que ver con el mío, me estaba gritando que no le hiciera daño a Junior, pero eso no lo podía escuchar él. Lilian se consumía en su propio dolor dentro de mi interior- ¿Quieres que le diga algo de tu parte? Aparte de que aún la sigues amando, claro.