Para mi lobita 15 Dias de Felicidad

Con la oscuridad de la noche y esperando papa ni mis hermanos estuvieran habia acomodado todo en su lugar para darle a mi pequeña un momentto de felicidad recatda; pues habiendole enviado la invitacion para pasar un rato ameno celebrando los quince dias de lo nuestro.

Me vesti elegantemente adhoc a la ocasion; un frac negro cubriame... un poco anticuado quzias pero esperaba le gustara



Aguarde en la penumbra hasta que ella entrara

Entrar de nuevo en aquella casa me producía un vacío difícil de ocultar, pero había recibido una lechuza muy bonita de mi hermano.


Lilian Sith X
Direccion:
Lo mas Profundo de mi Alma
Calle Te Amo
Esquina con Te Quiero
No. TK1CHY2M

Se le colicita su prescencia en la Mansion Sith Xeon este dia al filo de las 10:30 p.m. para una velada muy especial; para celebrar los primeros quince dias de haber hecho de mi vida la tuya...

Se que los retos son duros pero; por momentos asi vale la pena vivir.



La verdad es que lo del número seguía dándole vueltas cuando entré en mi habitación y dejé la mochila sobre la cama.
La oscuridad cubría el cuarto, podía escuchar los lagartos de la pared, una familia se había alojado en uno de los recobecos y los había tomado de mascotas, ellos cuidaban de mi habitación cuando yo andaba por el colegio.

Levanté mi varita y susurré un pequeño "Lumus", no me gustaba la oscuridad, aunque la luna estuviera brillando en el cielo, el colgante que me había regalado Jess, funcionaba a la perfección.

- Creo que aún queda un poco de tiempo para la hora acordada -dije dejándome caer sobre la cama, rebotando la espalda en el colchón, abriendo los brazos y fijándome en las formas que la luz proyectaba sobre el techo.

Con sigilo avance en la penumbra hasta casi llegar a la cama fue entonces que al poner la mano sobre un mueble algo mordiome haciendome dar un grito tropezando con el mismo mueble yendo a caer sobre lilian mas para no aplastarla gire sobre mi abrazandola cosa que hizo que ambos cayeramos al alfombrado piso de su cuarto... de nuevo ella encima mio

En vez de decirle algo la bese mientras su pelo nos cubria

Estaba pensando en lo de aquel número cuando escuché un grito fui a incorporarme pero alguien se colocaba sobre mi, me tomaba de la cintura y me hacía caer de la cama, con la respiración entrecortada y soltando la varita de mis manos.

Parpadeé un par de veces, resulta que sólo era Junior, sonreí y al intentar incorporarme me tomó más junto y me besó.
Por supuesto le correspondí el beso, sus labios me volvían loca y hacían que me encendiera, notando como el calor se agolpaba entre mis piernas, y humedecía aquella zona.

- ¿Se puede saber porque has gritado? -por suerte mi vestido de gasa no se había roto, pero mi voz sonó en un susurro, como si estar de aquella manera con él fuera algo prohibido, cosa que me divertía mucho más.

- Porque - dije lentamente mientras besaba su oreja y mis manos recorrian su espalda... el ser su novio parecia tan inocente excpeto cuando sus palabras sonaban asi, en esos momentos recordaba las sensaciones que ya habianme algunas chicas provocado mas esto era mas intenso.. mi boca callo un momento pasando a emitir solo sonidos leves puesto que se ocupaban de recorrer su cuello oreja y la comisura de sus labios hasta que bruscamente pare, una opresion debajo mio se hizo presente y recorde lo que antes me pasara a veces con chicas de mayor edad pero esta vez como con las sensaciones era mas fuerte tanto asi que pense que esa opresion tambien la lastimaba a ella por lo que me quede inmovil hasta que trate de terminar mi respuesta a su pregunta

- Po or qu que ... me go gol... pie... la pierna - dije tartamudeando cin poder reaccionar... mi cuerpo no se movia... ante ella... estaba nervioso

Me quedé mirándolo directamente a los ojos, me estaba mintiendo.
El ulular y batir de alas de una lechuza rompió el encanto de momento.
Me levante despacio, apartando sus manos de mi.

- Vuelvo enseguida -en la ventana se encontraba Hermes, una lechuza que conocía algo- ¿Que haces aqui?

La carta levaba dos partes, una se preocupaba por el plan que habíamos ideado, la otra era una advertencia con el ser en e que me encontraba en estos momentos.

- Junior, ¿Estuviste hablando con alguien en la sección Prohibida de la biblioteca? -me acerqué a él después de romper la carta y lanzarle un Flagatre.

- Si... con una alumna un alumno y una profesora bastante revoltosa - dije sin tapujos pues nada tenia que esconder y si tenia algo que; mil cruciatus no valdrian para hacerme revelarlo... aunque ese hecho aislado no era relevante

Usando un desiluminador que habia encontrado en la cocina encendi las luces de aquel cuarto mirando con desgana su reaccion puesto que le dio mas importania a todo lo demas que a lo que se supone era importante asi que... despues de haberme golpeado la pierna y haber ridiculizadome tirandola conmigo al piso y para evitar que se hiciera notorio que mi hombria despertaba dije en tono sutil - descanza que te eh preparado una buena cena... creo que te gustara - ante la luz cegadora de ahora rasque mis ojos para aclarar la vista buscando mi ropa medio deslumbrado

- ¿Una profesora revoltosa? -mi cabeza se ladeó sin entender esas palabras- ¿Te gusta esa profesora? Porque claro, yo incluso podría llegar a entender que te excitase el simple hecho de verla desnuda, supongo que ella tendrá unos atributos físicos que yo aún no tengo. Y seguro que con ella aprendes más sobre eso que conmigo, porque yo soy virgen y me gustaría segur siéndolo durante una temporada larga.

Lo miré a los ojos furiosa, pero en un instante relajé la mirada y le sonreí.

- ¿Una cena? ¿Has preparado una cena para mi? -había encendido las luces y en su dedo se veía un hilillo de sangre.

Me acerqué de nuevo a él, y con sumo cuidado tomé su mano entre las mías para acariciarle con la lengua el corte.

- Creo que Rodo te mordió, es una lagartija que protege mi cuarto de intrusos, seguro que la chafaste cuando te acercabas a sorprenderme -saqué su dedo de mi boca y le besé los labios.

- Emmmhhh si... supongo fue el - dije sin recordar muy bien la mordida mas ahora si ella era muy convincente cuando se lo proponia pero por alguna razon el brillo en sus ojos era diferente por lo que decidi que en vez de hacer nefasto el festejo que le prepare trataria de que no nos dañaramos en ese dia

- La profesora... no me gusta... sonare infantil pero... los adultos son muy aburridos... - para mis gustos pense

- Bueno... pues ... se nota que estas cansada... sera mejor que te deje descanzar y ... - la mire despues de leer su mente - la profesora puede ser muy guapa pero ella no tiene lo que tu.... ten... - tenias pense puesto que segun pensaba yo ya se le habia acabado el capricho; lo cual entendia pero dolia porque yo como sith siempre cumplia mi palabra de amarla hasta el fin de los tiempos

- No te vayas -dije despacio- Quiero que te quedes a pasar la noche conmigo. Quiero dormir rodeada por tus brazos, y sentir que aún me amas. La nota decía que querías hacerme daño, mi pregunta es: ¿Por que? ¿Cuando te he hecho daño yo? Y Rodo no es él, sino ella. Es una lagartija, la hija de una familia de lagartijas que cuidan mi cuarto. Se llaman, Poseidón, Anfitrite, Tritón, Rodo y Bentesicime. Dos machos y tres hembras, ellos cuidan de mis cosas y yo les doy un lugar seguro en el que estén fuera delos depredadores. Cuando me aburro pues hablo con ellos.

Me quedé mirándolo, a la espera de una contestación.

- De noche la temperatura de este cuarto baja muchísimo, y los pies se me quedan congelados. ¿No quieres calentármelos? ¿Por que no cenamos antes de acostarnos? -era tonto no aprovechar una cena ya preparada.

Hubiera esperado una razon para su pregunta como... porque quieres hacerme daño cuando yo te amo tanto mas fue otra la causa de su pregunta, en realidad no confiaba en mi por tanto no valdria darle una respuesta si no la creia asi que me limite a aclararle

- Hacerte daño yo a ti ... no - ironias de la vida pense - con gusto probare los aliemntos que prepare... ese era el plan desde un principio - dije aunque habia algo que no me convencia, parecia que me usaba a su antojo y aunque cuando no lo admitiera ella era mas importante de lo que nadie hubiese podido imaginar por lo menos para mi

Mas armandome de valor dije - no te preocupes... si es preciso te arropare eta noche y velare tu sueño ... -

- Me lo haces gastando ese tono condescendiente conmigo, haces exactamente lo mismo que papá. Si no te gusta algo deberías enfadarte, gritarme, intentar pegarme, no esconderte y dejar de afrontar los hechos como siempre ha hecho él. Hay que ser valiente, Junior, hay que sacar el genio cuando las personas te hieren y dejarlos en su lugar -volví a relajar el tono de la voz- Ahora...¿Serías tan amable de acompañarme en la cena que tu mismo has preparado? Por cierto, tengo algo para ti.

Me volví y me dirigí a la cama, en la mesita de noche tenía algo que le había comprado hacía unos días, era una estatuilla pequeña, pero cambiaba de color, y servía de alerta para intrusos, un guardián en donde todo el mundo veía un pisapapeles.



- No lo envolví, porque cuando lo intenté quemó el papel, no le gusta que le tapen los ojos. Y yo ya no soy una intrusa par él, por lo que no me lanzará fuego -esperaba que le gustase.

- Gracias... aunque muy bien no se que es... parece gracioso - dije recibiendo el cursioso objeto que sin duda me hizo esbozar una gran sonrisa disfrazada y media oculta por el hecho de que siempre crei que mi patronus seria un dragon en vez de una serpiente como papa y el tio

Me movi hasta la parte de la mesa donde yacia un plato para retirar el asiento y que se sentara para despues decir - ahora entiendo a papa.... no podria enojarme contigo, gritarte y mucho menos golpearte ... - dije cuando se sento arrimando la sillap ra que se acomodase

- Pasaria mil dias en azkaban si de defenderse se tratara ... -

- Es un guardián, pero tiene pinta de pisapapeles, por eso es grandioso, si alguien quiere algo que ocultas, alguien que sea distinto a mi, le lanzará una llamarada -no iba a ser tan idiota de regalarle un guardián que no me reconociera- y la próxima vez se lo pensará en urgar entre tus cosas.

Acepté su caballerosidad y me senté en la silla, retirando la falda del vestido para que no se arrugase, colocándolo bien bajo mi posaderas, sin arrugas.

- ¿Que cena has preparado? -mis ojos brillaban expectantes, tenía hambre, hacía muchas horas que no comía- Papá no lo sabe todo, pero él no podía golpearme, aunque me consta que a sus parejas si que las golpeba.

- No se me hace que papa fuera de ese tipo de personas jamas creo que haya golpeado a tu madre o a la mia - dije mientras miraba la mesa reconociendo los platillos

- No es tanto de mi estilo - decia aun con recelo, su actitud hacia mi ahora habia causado en mi un efecto de autodefensa para con ella - pero para el plato fuerte - señale con una malo un gran platon con un trozo de carne termino medio - carne apenas pasada por la plancha .. con su jugo en ella aun espero te guste pero... empecemos con una sopa -

Y pensar que habiame vestido de pinguino para cenar lo que bien ubieran podido ser palomitas de maiz, un tazon de cereal o que se yo... ese sentimiento de tranquilidad llenaba mi ser finalmente comodecia aquella cancion "¡¡¡hey!! es siempre mas feliz quien mas amo y ese siempre fui yo"

Carne semicruda, los ojos se me abrieron como platos, por fin alguien que entendía como me gustaba la carne, y cuanto me gustaba.

- Oye Junior, ¿Que poderes tiene un Elemental? Porque eres el loco de la familia, anda, refréscame la memoria un poquito -negué con la cabeza a la sopa, con la carne tenía de sobra.

- Leemos mentes ajenas y por ejemplo... si quieres que aulle tocandote puedo tener tus habilidades innatas - dije cortando un pequeño trozo de carne poniendolo enfrente mio y luego usando mis habilidades me teleporte hasta su lado quedando el bocado justo enfrente de sus labios - somos los kimeras del mundo magico -

- Así que sólo tocándome tienes mis habilidades, ¿eh? ¿Y durante cuánto tiempo, o es algo que consigues permanentemente? ¿Y que pasa si otro te toca a ti? ¿También obtienes sus habilidades?, Quiero decir... -me quedé mirando el trozo de carne y sonreí, abriendo la boca delicadamente a la vez que le daba un suave apretón en la mano- Gracias -dije relamiéndome los labios.

Yo sabía comer sola, pero si pretendía dármelo él, por mi no había problema, menos trabajo para mi.

- No el efecto es unilateral - dije despues de dar un par de pasos volviendo al otro lado de la mesa - es la ventaja que tenemos... para vencer a un elemental debes tener un ataque tan poderoso que pueda matarlo de un solo intento -

- Oye por cierto ese guardian de secretos tambein cuidara mis seceros de ti - dije sentandome del otro lado queriendo saber si su regalo tambien protegeria mis secertos de ella lo cual resultaria muy util para algunas sorpresas y regalitos para mi hermana

- ¿Tus secretos? Si esos secretos tratan de hacerme daño, no, pero si son buenas sorpresas, supongo que sí, salvo que lo trates mal y no lo alimentes, entonces se buscará alguien a quien guardar que lo aprecie -le guiñé un ojo, después de tragar el bocado, estaba riquísima la carne, justo en su punto- ¿No vas a comer tu?

Pinche un trozo de carne y se lo acerqué con el tenedor hasta la boca.

- Esta bien pero solo un bocado no me gusta la carne semicruda yo soy mas de carne 3/4 - dije probando el bocado que habiaque decirlo tenia un toque agreste pero rico en realidad esa estadia de la mañana entera en la cocina no habia sido en valde, estaba rico

- Admito que ya se porque te gusta la carne asi... un pajarillo me lo dijo -

- Por cierto gracias por estos quince dias - dije aunque yo hubiese sentido que era solo un sueño... de unos segundos por la felicidad de ese tiempo, le mande un beso volado con la mano

Me quedé mirándolo directamente a los ojos.

- ¿Quien te dijo y que? -no entendía porque si quería saber algo de mi misma no me lo preguntaba directamente, yo lo hacía con la gente, no iba por ahí con chismes, supongo que por eso quienes eran mis amigos de verdad, lo eran para toda la vida, porque si me molestaba algo de ellos no tardaban en saberlo directamente de mi voz, y mis maneras, no muy ortodoxas, pero eficaces después de todo- Quiero que me digas a quien le preguntaste y porque no me lo preguntaste a mi directamente.

- Sencillo si quiero darte una sorpresa no debes esperar que lo haga por eso es que tengo hurgar en tu mente - dije con una sonrisa y a pesar de saber que tenia su caracter esa actitud suya, le estaba dando un detalle y se fijaba en los detalles y no en la intencion, en ese momento me senti mal porque mi regalo habia sido imperfecto y ella se merecia todo

- Bueno - me levante un poco apenas para sacar un pequeño paquete - te dejo un regalo, - dije con ciertaa decepcion en mi rostro

Acerqueme a ella dandole un beso dejando en la mesa esa cajita

- Pero no hurgaste en mi mente, estuviste hablando con Lily, ¿O me equivoco? -porque se negaba a darme el beneplácito de que una mujer siempre se iba a enterar de todo, aunque los hombres pensasen que no lo sabían todo, cuando ellos venían nosotras ya habíamos ido cuatro veces.

Dejó un regalo sobre mi mesita de noche.

- No necesito regalos, Junior, necesito que confíes en mi, y eso no lo haces, por lo que puedes llevarte el regalo si quieres -palabras demasiado duras, pero ya no sabía como hacerle entender, que sin confianza, no habría nada, por más que me doliera.

Sujete la cajita que era de un color cafe palido, la aprete tan fuerte entre mis manos que la cajita como tal quedo aplastada no asi su interior; parecia que el encanto de su noviecito se le habia acabado y me dolia porque para mi era como la primera vez.. la criatura mas bonita uqe habia conocido - si, estuve hablando con Lily le dije que podiamos ser buenos amigos hasta que ne un futuro ellos traten de venir por mi familia y entonces me van a conocer enojado - la mire de reojo sin poder ocultar cierto recelo antes sus palabras - eh hablado con Lily, Jessica, Isabel, Mist, Anya ... incluso con Tempest que no te cae bien; yo... si confio en ti... pero tu; no estoy seguro de que confies en mi.. - la sensacion de volver el estomago resurgio mas, no era la carne ni nada por el estilo sabia exactamente porque pasaba eso mas nadie lo sabia; debia salir de alli para no dar un espectaculo que quizas le asustaria

No deje que esa sensacion produciese ese espasmo que llevaria mi mano al a boca o probablemente la mancharia de sangre mas en cambio mi piel ahora parecia mas palida por ese instante