Viaje a Canadá (Bella Malfoy)

Recuerdo del primer mensaje :

Luego de salir de Hogwarts, aparecimos en el patio de la antigua casa de mis padres, hacia el sur de Ottawa, en la ribera del Rideau. La entrada trasera de la casa, nos recibía con un gran jardín de tulipanes, que mi madre había plantado hace muchos años - Pues bien, esta es la casa - dije sonriente - estamos un tanto alejados del centro, pero mis padres lo prefirieron así, para poder hacer magia tranquilos. La casa se encuentra oculta a los muggles, y si pasan por el río, se ve una cantidad de árboles impenetrables - dije sonriente

Sonreí escuchando cada una de la palabras que me decía. Mencionó a otra chica además de la madre de sus hijos y eso despertó mi interés. Aunque claro, no mucho, no estaba acostumbrada a tener rivales. Pero lo dejé pasar sin más. También me había llamado la atención ver que siempre ha estado del lado de "los buenos" y eso me gustaba mucho más, Orfeo me parecía un reto, algo raro para mí, un niño bueno con un lado salvaje que ocultaba un poco antes de dejarlo ver. Reí con las "locuras" que había hecho en el colegio y apuré mi copa extendiéndola para que me sirviera de nuevo, adivinando sus intenciones cuando él vació la suya.

-Eres apenas un novato, Tonks - dije con burla alzando suavemente una ceja mientras dejaba escapar un risita más- Entonces, ¿esto es apenas una máscara? - lo señalé con el dedo sonriéndole con malicia- Tendré que descubrir que llevas dentro, Tonks... - me mordí el labio juguetonamente-

Le serví su copa mientras me reía por el comentario de que era un novato - pues tal vez sea un novato para ti, pero realmente soy más un chico bueno que malo. Pero soy pervertible - dije picaronamente mirándola a los ojos - No creo que sea una máscara, solo intento mantener el lado salvaje al margen. Aunque a veces es complicado, sobre todo ahora como maestro, siempre debo mantener el control y ser un buen ejemplo para los alumnos. No te miento que hay veces que me encantaría poder hacer alguna locura con algún grado de maldad, pero no puedo andar haciéndolo asi como asi porque soy un ejemplo para los muchachos. Creo que eso siempre me reprimió - bebí otro sorbo de vino y saqué otro cigarrillo. Lo encendí y di una larga aspirada - Y si Bella, tendrás que descubrir que hay dentro de esto - me apunté con un dedo y miré a Bella - tendrás que averiguarlo... - bebí otro sorbo de vino y le di a entender que estaba listo para su siguiente pregunta

Sonreí con malicia al tiempo que me dijo que era pervertible y lo miré con intensidad - Afortunadamente, te has topado con alguien que puede pervertirte facilmente - me mordí el labio y después me llevé la copaa a los labios bebiendo un trago más. Sentía ya las mejillas un poco subidas de tono y de calor- Deberías enseñarme a ser un buen ejemplo para mis alumnos, siempre ha sido mi punto débil - sonreí un poco y me incliné hacia él- Yo puedo ayudarte a hacer alguna locura con cierto grado de maldad, tú sólo di que sí y si te preocupan los alumnos... no te preocupes... será nuestro secreto - me acerqué más y lo besé sutilemnte en los labios, me separé inmediatamente- Será un verdadero reto descubrirte, Tonks - preparé la siguiente pregunta- ¿Sexo salvaje o tradicional? - antes de que respondiera solté una carcajada- No es cierto... - me llevé un dedo a la boca en una mueca pensativa- ¿Cuál es la locura que tienes en mente? La que sea...

Sonreí ante su beso, y luego me reí con su pregunta que cambió instantáneamente - pues si quieres pervertirme, no hay ningún problema, yo no opondré resistencia - sonreí con picardía - me entrego completamente a tus manos perversas - medité la respuesta a su pregunta mientras bebía un sorbo de vino - pues, no tengo ninguna en mente, como te digo, soy un chico bueno. Me agrada bastante la idea de que puedas ayudarme a soltar mis ideas. Me entrego en tus manos Bella - me acerqué rápidamente y le planté un corto pero apasionado beso en sus labios - y con respecto a la otra pregunta... prefiero el salvaje - aspiré nuevamente mi cigarro y reí a carcajadas

Respondí su beso con la misma intensidad, pero cuando se separó me quedé esperando un poco más, pero cuando lo miré darle otra aspirada a su cigarrillo y reírse, me incorporé de nuevo hasta mi lugary lo miré con una sonrisa divertida. Jamás había encontrado a alguien como Orfeo. Era un tipo curioso, no podía abalanzarme sobre él sin más, me gustaba ese tipo de "misterio" que encerraba. Parecía un chico malo y en el fondo resultaba que era tranquilo y hogareño, pero supongo que algo podría hacer por él.
-Me gusta que te pongas en mis manos - sonreí mientras me acercaba más a él- aunque no sé si sea buena idea, cariño- pasé mi dedo por sus labios despacio- Puede pervertirte demasiado... ¿no te molesta? - cuando escuché su respuesta a mi pregunta principal solté unas carcajadas sinceras y respondí- ¡Perfecto! Igual que a mí...

Sentí su dedo recorrer mis labios lentamente. Tomé su mano y mientras comentaba que ella prefería el mismo tipo de sexo, le besé el dorso de su mano. La sostuve conmigo y me acerqué a ella - pues quizás puedas pervertirme en soltar mi maldad interna... y eso me encanta - sonreí y volví a besar nuevamente su mano. Apagué el cigarrillo. La miré a los ojos y sonreí - me encanta tu forma de pensar Bella - no había encontrado a una mujer como ella, me encanta su forma de pensar y que no se acobardara al expresar sus ideas. Tenía una personalidad fuerte y eso me atraía mucho - pues bien, Bella ¿tienes otra pregunta o ya puedo devorarte a besos? - le dije acercandome a su cuello y besándolo lentamente

-Estoy empezando a dudar acerca de si tienes maldad interna o no - sonreí mientras besaba mi mano y me dejé querer un momento sin nada más e hice una mueca casi maléfica- Y eso que no tienes ni idea de lo que pienso ahora... - apreté su mano donde tenía la mía y me acerqué al tiempo que él también lo hacía- Estoy impaciente por que me comas a besos... o comerte yo... debes tener un sabor delicioso... las probaditas prometen mucho... - sonreí de lado mientras me besaba el cuello- ¿Qué prefieres? - metí la mano entre su cabello- Yo prefiero empezar a besarte.Te preguntaré más cosas por la mañana.... - reí un momento ante la idea- ¿Y tú no quieres saber nada de mí? ¿O prefieres descifrar mis secretos lentamente?

Seguí besando su cuello y sin separarme de ella respondí - pues me encantaría saber más de ti, pero ya que estoy en esto, prefiero seguir esta labor - estaba besando cada centímetro de su cuello. Me acerqué un poco más a ella, colocando una de mis manos en su cintura - además que tengo el día de mañana, y el que sigue y así sucesivamente para conocer tus secretos, pero tienes un sabor delicioso Bella, sería una falta de respeto para tu hermosura que dejara de devorarte ahora que ya empecé... o que tu me devores a mi - subí lentamente por su cuello hasta llegar a su rostro. Deslicé mi rostro por el perfil del suyo hasta encontrarme con sus labios - pues bien Bella ¿esto será una noche de besos si o no? - dije con una sonrisa pícara en rostro, pegando rozando mis labios con los suyos al hablar. Sentía el compás de su respiración y podía sentir la sangre corriendo más rápido por sus venas

-Espero que no te hagas adicto a mí antes de siquiera conocerme un poco - sonreí de lado mientras sentía sus tibios labios en mi cuello y su mano en mi cintura, se acercó más a mí y mi corazón se puso a brincar como si fuera el de una adolescente y me reprendí un poco en mi fuero interno. Escuché lo de la hermosura y me sentí realmente halagada- Bueno, realmente no quisiera que me faltaras al respeto de esa manera... devórame si quieres, lobo - sus labios contra los míos y me pegué a su cuerpo poniendo mis manos en su cuello y su cabello moviendo mis labios sin besarnos- ¿Realmente debes preguntar eso? - sonreí pícaramente mientras esperaba que él se decidiera a besarme, sentía que las manos me temblaban y a pesar de la tensión, noté que el también estaba muy animado.

Realmente - dije sin alejarme de como estaba, rozando los labios de Bella - aunque me dijieras que no, ya es demasiado tarde - la miré directamente a los ojos - acabas de caer en las garras del lobo, caperucita - un brillo de picardía se reflejó en mi ojos - y no hay nada que puedas hacer para librarte de mí - susurrante dije estas últimas palabras, antes de presionar sus labios contra los mios. Deslicé mi mano por su cintura hasta llegar a su espalda y la apegué a mi cuerpo, mientras nuestras bocas se unían en un beso apasionado. Recorrí la espalda de Bella hasta llegar a su cadera, y deslicé mi mano hacia su pierna - no tienes a donde correr, caperucita - dije separándome milimetricamente de sus labios y por apenas escasos segundos antes de continuar con el beso

-¿Y quién te ha dicho que quiero correr, lobo feroz? - me quedé aprsisionada entre su cuerpo y el sofá, aspirando el olor de su piel y saboreando hasta lo último del sabor de su boca. Abrí mis labios para recibir su beso con sabor a alcohol y un poco de tabaco- Lo último que quiero es liberarme, Tonks - le susurré cuando se separó un poco de mí y le mordí el labio inferior atrayéndolo a mí de nuevo para seguir besandolo, mis manos fueron a su chaqueta (?) y empecé a hacerla a un lado deslizando mis dedos suavemente por la piel de sus brazos hasta quitarla por completo y arrojarla a un lado en el sofá - Esta caperucita es algo... inquieta, pequeño lobo - le sonreí con pícardía mientras mis manos subían de nuevo por sus brazos para quedarse en su cuello-

Pues aunque quisieras ya no podrás - dije mientras dejaba que me sacara la chaqueta. Luego que volvió a tomarme del cuello, la tomé por la cadera, haciendo pasar su cuerpo debajo del mio. Cargué mi peso en un brazo para no pesarle a ella. Le tomé su cabello, y se lo acomodé hacia un lado dejando a la vista su cuello, el cual comencé a besar comencé a besar, intercaladamente, con sus labios - Eres una dulce y lujuriosa tentación, Malfoy - dije pegado a su oreja, mientras me deslizaba a besar nuevamente su boca - tu aroma me embriaga

Seguí sus movimientos hasta quedar debajo de él sobre el sofá. Dejé que me acomodara el cabello a un lado y poco a poco sus labios sobre mi cuello y mis labios fueron erizando mi piel. Dejé que su mano tomara firmemente mi cadera y sostuve la respiración mientras él se acomodaba sobre su brazo - Lamento decir que así es Tonks... y ahora caíste en mis manos... - le murmuré mientras le seguía el beso suave y apasionadamente- metí mis manos por debajo de su camisa acariciando su espalda con lentitud- Eres implacable, mi lobo - sonreí de lado separandome un poco de su boca, observando cada uno de los detalles de su rostro, para después volver a buscar el beso-

No la hice esperar y la seguí besando luego de su intervención. Recorría el contorno de su silueta lentamente, desde su cadera hasta su hombro. La atraje a mi con un poco más de pasión para fundirme en un gran beso con ella - Eres una mujer directa Malfoy - me había separado milimétricamente de ella. Sentía su mano en mi espalda y el contacto con su piel me hacía hervir la sangre. La seguridad y la confianza de Bella, me hacían dejar salir mi instinto animal - podría devorarte completa - me enderecé un momento, solo para sacarme la camisa que llevaba, quedando con el torso desnudo - lo siento pero el calor me está matando - dije acercandome nuevamente a ella y atrapando su labios en un beso

-Y te encanta, ¿cierto? - sonreí de lado mientras sentía como sus labios se enlazaban con los míos. Sus manos iban de arriba abajo por el contorno de mi cuerpo y a cada centímetro hacía que me sintiera mucho más acalorada por su contacto. Uno de los tirantes delgados de mi camisón se cayó por mi brazo sin querer. Cuando se enderezó para quitarse la camisa me quedé admirando su torso y levanté la mano para ponerla sobre el, me mordí el labio sin quitarle la vista de encima - Bendito calor... - lo recibí de nuevo, posando mis manos en su espalda y besándolo sin esperar un minuto-

Besé sus labios, devorándolos con pasión. Sentía su corazón acelerarse, el calor invadiéndola. Ví como el tirante de su camisón se deslizaba por su hombro, y sin intenciones de arreglarlo, lo afirmé donde estaba. Comencé a besar el contorno de su rostro, bajando hacia su cuello. Al llegar a el, lo besé de un lado a otro, devorándomela completa. Me dirigí hacia el hombro derecho y luego hacia el izquierdo, besando completamente toda la parte superior de su anatomía. El tirante que estaba afirmando con mi mano, lo deslicé más abajo, hasta sacarlo por su brazo. Con mi mano, recorrí todo su cuerpo, sus pechos, su cintura, su cadera, su estomago, cada centímetro de su cuerpo. - Bella, esta será una larga noche - dijé mirándola con sensualidad y llendo directamente a sus labios.

Cuando sus labios se posaron en mis hombros no pude evitar morderme un poco el labio inferior con deseo. Había bajado por completo el tirante travieso que había caído, hasta sacarlo -Creo que puedo sobrevivirla, Orfeo - le susurré mientras mis labios buscaban de nuevo los suyos fervientemente al mismo tiempo que sentía sus manos a lo largo y ancho de mi cuerpo, yendo de arriba abajo y en todas direcciones. Mis manos se movían por su espalda desnuda suavemente como queriendo memorizar cada centímetro de piel, cada músculo tenso y me separé de sus labios un poco para poder besar sus hombros tibios, duros y mordí un poco -

Sentí la leve mordida de Bella en mi hombro y eso me encendió aún más - No esperaba que no pudieras sobrevivirla - Mi mano seguía recorriendo cada centímetro de su piel. Sentía la sangre fluir por cada una de sus venas, sentía como la temperatura de su cuerpo aumentaba, sentía como su respiración aumentaba de ritmo. Deslicé suavamente el otro tirante de su camisón, sin sacarlo completamente. Volvía sus labios, besándolos con más intensidad que antes.

Sus besos estaban poniéndome más allá del deseo y sus manos amenazaban con hacer que mi sangre hirviera un poco más. Noté como había bajado mi otro tirante y sonreí con malicia, mis manos dejaron su espalda y fueron hacia su cinturón que saqué rápidamente y lo tiré a un lado- ¿Sabes? - sonreí separandome de sus labios un poco sólo para volver a besarlos- Éste sofá me está incomodando - le mordí el labio inferior.

Sonreí ante sus palabras. Besé sus labios antes de decir - entonces vamos a otro lado - tomé sus piernas, las guié para que las enlazará a mi, me puse de pie y la llevé cargándola a través de la sala hacia el pasillo y luego a mi habitación. Con una mano abrí la puerta y entramos. Caminé hacia mi cama y nos recosté suavemente, sin dejar de besarla en ningún momento - ¿está mejor esto? - pregunté con picardía, dirijiendome hacia su cuello para besarlo

-Mucho mejor - sentí el colchón suave contra mi espalda y su cuerpo ferréo sobre mí, mis manos sobre su espalda desnuda y mis labios contra los suyos con pasión. Los tirantes de mi vestido hacía rato que estaba abajo de mis hombros y el vestido se me había deslizado dejándome en ropa interior de la cintura para arriba. Dejé que sus labios bajaran a mi cuello y me recliné en una de sus almohadas. Me di la vuelta sobre él, quedando encima, con mis piernas a ambos lados de su cadera. Mis manos fueron hacia el botón de su panatlón y empecé a abrirlo sin quitarle la vista de encima- Mi lobo - deslicé mi dedo índice desde su barbilla hasta el borde de su pantalón.