El alba recien daba sus primeras pinceladas sobre el cielo nocturno al igual que la vida que comenzaba a aparecer dentro de los pisos inferiores, las luces de los pasillos aun batallaban por iluminar aun la estructura del edificio, dandole un toque romántico y hetereo.
En aquellos pasillos una silueta avanzaba, la de una joven rubia, de tez blanca la cual tenia un resalte especial gracias a la neblina que daba un bello efecto luminoso casi efimero, como en aquellas primeras peliculas a color donde las muchachas parecian siempre bellas e inusualmente inocentes, no todo su rostro se podia ver ya que llevaba alrededor del cuello una bufanda amarilla con negro que cubria sus labios dejando que la magia de los ojos azules destacaran. Parecia ir bastante abrigada y no era menor ya que la nieve poblaba el exterior, algo que no concordaba con la figura que avanzaba era que llevaba en su diestra una escoba de aspecto gastado en la que se podia ver que incluso tenia grandes magulladuras.
La muchacha se movia rápidamente y parecía tener prisa... esta vez en realidad estaba muy nerviosa lo cual se notaba porque sus pasos que eran sigilosos cual ratón ahora sonaban como los de cualquier persona, al llegar a la puerta se acomodo la ropa; miro a su alrededor nerviosa consiente de que alguien le seguía ...cando n logro a ver a nadie se apresuro a salir, cerrando los ojos para que la balncura de la nieve no la cegara, exponerse al clima. El frió ambiente provoco que sus mejillas se sonrojaran y abrio los ojos antes de dar un salto afuera, una vieja mania que le ayudaba a no hecharse atras. La puerta se cerro tras de ella tardo en cerrarse, pero ella no fue conciente de eso puesto que difrutaba del clima gelido y aquellos momento en que estaba sola consigo misma y solo pudo avanzar de forma confiada.
Mientras avanzaba daba pequeños saltos para dejar huellas desiguales en la pizarra blanca que le brindaba la naturaleza. Se rei divertida por las travesuras que hacia y ver como se asomaban algunos animalitos, intentando ver quien era la dueña de aquella risa.
-Frosty otra vez te luciste- dijo en voz baja pero alegre mientras llegaba a su lugar de destino.-Solo no me jueges bromas cuando ando en la escoba ¿Trato?- se reia de si misma mientras se acomodaba sobre su escoba.
-Bueno Cali a mentalizarte, debes tratar de conseguir el puesto en el equipo asi que vamos a ello - dicho esto y poniendo las manos sobre la escoba comenzó a ascender, al llegar a lo mas alto que pudo se detuvo para estabilizarse y luego saco de su bolsillo una pequeña pelota sin pensar que podría suceder.